El país se ha visto conmocionado por las graves mutilaciones sufridas por un número considerable de personas, causadas por los perdigones disparados por personal de Carabineros de Chile durante las manifestaciones. Dado que el Estado está llamado a cautelar los derechos de las personas, aún en situaciones de desorden público, y que para ello debe informarse adecuadamente en la aplicación de sus políticas, un grupo de físicos se ha sentido particularmente interpelado, tanto por la gravedad de las situaciones como por el descuido evidente de los aspectos técnicos involucrados en el uso de esas armas disuasivas. Aún existiendo protocolos específicos para el uso de dichos elementos, no parece haber suficiente conciencia del daño que pueden producir a la integridad de las personas.
Existe un trasfondo de una mayor importancia en esta situación, que es el escaso valor que se le da a nivel de las autoridades al rol de la ciencia para informar de los distintos aspectos que entran en juego en las políticas públicas y acciones del Estado y el gobierno.
El Presidente de la Sociedad Chilena de Física ha considerado necesario solicitar a un Comité Ad Hoc, formado por tres socios de reconocida idoneidad, que emita un informe respecto del tema. Este reporte se ha hecho llegar al Ministerio del Interior, para que tenga la oportunidad de juzgar, con base en evidencia y análisis científico, cuáles son los riesgos para la población de la aplicación de este tipo de armas.
Con esto se espera complementar otros análisis sobre el tema, conocidos a través de los medios de comunicación y que merecen también atención en razón de su carácter eminentemente técnico. Todavía en nuestro país no es común observar el ejercicio de la crítica y análisis basado en evidencias y con un nivel adecuado de conocimiento que permita deducir conclusiones válidas. Junto con la cultura cívica debe coexistir una cultura científica básica, especialmente en quienes tienen altas responsabilidades en el Estado; pero, también en dirigentes sociales y empresariales, los medios de prensa y tomadores de decisiones en general.
No se debe olvidar que lo que se halla en juego son los Derechos Humanos, un aspecto de nuestra vida como país de significativa sensibilidad y que es tarea de todos resguardar celosamente. Por ello, quienes pueden colaborar en ello deben aportar desde las propias especialidades, especialmente cuando la integridad de las personas pueda verse amenazada y pudiere observarse una cierta ignorancia respecto de tales riesgos.
Dr. Luis Huerta, Presidente
Dr. Leopoldo Soto, Secretario General